PSICÓLOGO DEPORTIVO
Hola, soy Pablo Piñeros
Con pasión por el deporte y la psicología, mi trayectoria ha sido impulsada por el deseo de fusionar estos dos mundos, creando un enfoque único de psicología deportiva que va más allá de la superficie. Como profesional joven pero experimentado, he tenido el privilegio de trabajar ampliamente con jugadores de fútbol en diversos niveles, siendo testigo de primera mano del profundo impacto que el apoyo y entrenamiento mental pueden tener en el rendimiento atlético.
Mi filosofía es sencilla pero poderosa: si bien se hace mucho enfoque en explotar la variable física y la variable técnica creo que la mentalidad no ha sido tenida en cuenta con el mismo rigor y al final es la que marcará la diferencia. En el alto rendimiento es el recurso que está siendo menos aprovechado por los atletas ya que las otras variables ya se han investigado y optimizado al máximo. Al aprovechar el potencial de tus pensamientos, emociones y mentalidad, podemos elevar tu rendimiento a nuevas alturas. No se trata solo de habilidad en el campo; se trata de cultivar una mentalidad ganadora que te distinga, creando un legado duradero en tu deporte.
¿Por Qué?
Después de años involucrado en el fútbol como deportista con el sueño de convertirme en profesional, comparto y entiendo profundamente la mente de mis clientes. También practiqué otros deportes como tennis, ping pong, e incluso ajedréz. Más allá del aspecto clínico de mi trabajo, comparto un profundo amor por el deporte y la competencia. Ya sea la emoción del juego, la camaradería entre compañeros de equipo o la búsqueda de la excelencia, entiendo los desafíos únicos que enfrentan los atletas. Es esta auténtica pasión la que me impulsa a ayudarte a navegar el terreno mental del deporte, capacitándote para superar obstáculos y abrazar el viaje hacia el rendimiento máximo.
Échale un vistazo a algunos de mis trabajos recientes con futbolistas, donde los hemos guiado hacia mejoras perceptibles al centrarnos en su juego mental y guiarlos para agudizar su herramienta más poderosa, su mente.